Un buen cuidado del esmalte dental, no sólo te asegura una bonita y brillante sonrisa, también evita enfermedades dentales.
El esmalte dental es la capa que recubre nuestros dientes y por su composición mineral está considerada la parte más dura de nuestro organismo. El esmalte es de color blanco o transparente y aporta brillo y dureza a las piezas dentales. El principal problema del esmalte dental es que está en constante contacto con los alimentos, los ácidos de la boca y las bacterias. Con el tiempo, el esmalte se desgasta y no se regenera de manera natural, por eso es vital tener un buen cuidado de este pequeño pero importante elemento de nuestra boca.
Si alguna vez has sentido dolor al masticar, sensibilidad en los dientes al tomar una bebida demasiado fría o caliente, o eres propenso a desarrollar caries, puede ser que no estés prestando suficiente atención a los cuidados del esmalte dental.
Para proteger el esmalte dental, en primer lugar, es necesario tener buenos hábitos y rutinas de higiene dental que incluya cepillado, hilo dental y el uso de enjuague , evitar los alimentos ácidos y tomar leche o queso para evitar la acidez.